Yoga

El ser humano está constituido por un cuerpo burdo o físico donde se manifiestan todas las experiencias, como un campo que contiene sensaciones, emociones y las diversas interpretaciones con las percepciones de la mente a través de los sentidos. Son muchas las fuerzas que intervienen a través de nuestro cuerpo, sin dejar de mencionar los impulsos, los instintos, el deseo, la voluntad, hay una carga del pasado, presente y también hay pensamientos generalmente especulativos de manera negativa sobre el futuro. Toda esta información nos lleva muchas veces a lo que yo llamo desintegrarnos o separarnos de quien realmente somos o mejor dicho de nuestro centro de referencia que es el presente. Si consideramos el aspecto socio cultural al cual estamos insertados, en la mayoría de los casos esta masa cultural nos arrastra de aquí para allá con sus tendencias alejándonos de manera de lo que fundamentalmente necesitamos.

Quizás alimentan nuestros deseos, pero no nuestras necesidades más profundas, dejándonos insatisfechos por momentos o abrumados por el vértigo que conlleva. Según mi manera de ver las cosas, esta es la causa fundamental por el cual muchas personas sienten ataques de pánico o de ansiedad generalizada provocada por una desintegración de nuestra verdadera individualidad.

Yoga etimológicamente viene del sanscrito yogah y significa unión. Esta unión refiere al punto de partida de toda nuestra expresión. Es la presencia Yo Soy. La observación testigo, la conciencia de todo nuestro ser, el regreso a casa y porque no decir nuestro contacto con lo divino.

La nobleza de esta milenaria disciplina nos convoca de manera subliminal a ponernos en contacto con lo progresivo y natural, nos acompaña como una madre tomando a su niño de la mano enseñándole como cruzar la calle.

¿Cómo encontrar nuestro sentido en esta vida, si estamos dispersando la energía ante cualquier estímulo que se nos presenta?
¿Cómo elegir, si confundimos lo certero con lo falso? Por eso considero que es de suma importancia conocerse para poder elegir las mejores decisiones. Conocerse para entenderse, para superarse, para abrazar todo nuestro ser y devolverle la oportunidad al organismo de recuperar su homeostasis.
Yoga es una disciplina que debería ser practicada por todos los integrantes de la sociedad, sin discriminación en edad, credo o raza étnica.
Todos necesitamos un íntegro estado de salud para poder llevar a cabo nuestra tarea en esta vida. Así como el cuerpo genera dolor para avisarnos que estamos perdiendo el equilibrio, puede generar bienestar al cuidarlo y fomentar la salud.

Crecer en la consciencia nos lleva a entendernos con mayor comprensión, permitiéndonos dejar de repetir patrones inconscientes que nos lastiman. Crecer en conciencia nos permite además vivir una vida más plena porque nos damos cuenta que vivir en el presente es el regalo más hermoso que podemos tener, porque la vida es un milagro que se nos es dado segundo a segundo.



Espero con este articulo aclarar dudas y sobre todo inspirar a todas aquellas mujeres para que prueben esta disciplina y sobre todo las convoco a seguir buscando el bienestar.

Muchas gracias, con mucho cariño,
Natalia Arneson.
Contacto: nataliearneson@hotmail.com

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